El amor no se busca se encuentra.
Y se encuentra en esa persona que te hace sentir especial. Cuando estás con esa persona el tiempo a tu alrededor se para, y piensas que nada puede ser más perfecto que él.
Te pasas horas pensando en él, hasta la mayor tontería te hace gracia y el mayor defecto se convierte en perfección.
Ese alguien con quien tener plena confianza para hablar de cualquier tema, que con un beso te haga volar. Esa persona con la que pasas una tarde y cuando llega la hora de volver cada uno a su casa ya empiezas a echarle de menos.
Esa persona que te saca una sonrisa aún cuando lloras las lágrimas más amargas, y es capaz de calmarte con un abrazo.
Esa persona que te mira y te sonríe y te mueres de vergüenza.
Esa persona en la que piensas nada más levantarte y es la última en que piensas cuando te acuestas...
Alguien que te conquista cada día con el mínimo detalle.
Perdemos la vida buscando lo mejor y dejamos escapar lo bueno.
Dejemos fluir los sentimientos y disfrutemos del amor cuando nos venga. Algún día puede que se termine, o puede que no. Por eso hay que disfrutar de cada día como si fuese el último.