Seguidores

jueves, 21 de octubre de 2010

Fortaleza.

Dicen que año nuevo, vida nueva.
En este caso yo podría decir, "Curso nuevo, vida nueva".
Y es que nada es igual. Es ahora cuando más madurez debo demostrar. El empezar en un sitio nuevo, unos estudios nuevos, sola,sin gente conocida. El tener que sobrevivir a una nueva aventura que la que me sumerjo convencida de comenzar a cumplir poco a poco el sueño que me persigue.
Día a día te das más cuenta de lo que echas de menos. Esos compañeros que tenía desde la infancia, compartimos toda una vida y ahora tomamos distintos caminos. La verdad que nada es para siempre, pero me gustaría estar compartiendo mi sueño con ellos y que ellos compartiesen el suyo conmigo.
Algunos se han ido lejos, otros los tengo por aquí pero la diferencia de horarios me impide verles...
Poco a poco la vida me va enseñando a ser fuerte. Aprendo día a día a no depender de nadie. Les echo de menos, sí, me gustaría tenerles conmigo todo el día, también, pero también he de ser fuerte, de ganarme por mí misma las cosas, darme cuenta yo sola que ahora todo depende de mí, de que ahora nadie está ahí para ayudarme cuando todo se pone cuesta arriba.
¡HE DE SER FUERTE!
No voy a olvidarme de los míos, por supuesto, pero he de empezar algo nuevo, compañeros que comparten el mismo sueño que yo, compañeros que viven conmigo la grandeza de la filología, más especialmente de la filología francesa, aprender a salir de mis problemas con seguridad.
FUERZA,FUERZA, FUERZA, FUERZA...

miércoles, 13 de octubre de 2010

Vuelvo a las andadas.

Por mucho que quiera cambiar mi cabeza, no puedo.
Sigo siendo la misma. No puedo forzarme a madurar completamente a los 18 años.
Me gusta la fiesta, desfaso como nunca (malos hábitos que tengo que dejar o no debo empezar, con una vez es suficiente...), me distraigo fácilmente en clase, me encanta la comedia, hablo en clase y a veces pierdo el hilo, me sigo juntando a los "gamberretes" de clase para armar jolgorio...
Tengo asumido que todo esto depende de mí. Ahora más que nunca me estoy jugando mi futuro, me defrauda a mí misma el no poder cambiar en estos aspectos, me fastidia pensar que puedo fastidiar mi sueño por tonterías de ese calibre, pero también me paro a pensar que es normal que a estas edades piense en pasarlo bien.
Habrá que plantearse dejar un poquito esos hábitos y centrarse un poco más en lo verdaderamente importante.
Pero es que no entiendo porqué en ciertas clases mi atención se sienta 100% en la profesora, cojo todos los apuntes que da y me felicitan por mi actitud, y sin embargo en otras clases me evado completamente.
En fin... hay cosas que nunca cambian, pero espero remediar esto.